Tocando. Sí, sí, porque para experimentar con tu guitarra, no necesitas saber, al menos, en un primer contacto. Y qué gusto da, empezar a sacarle sonidos a tu preciosa guitarra. Ese acercamiento es personal y único; disfrútalo, y poco a poco irás descubriendo cosas nuevas: ¿Y si tiro de una cuerda hacia arriba? ¿ y si golpeo las cuerdas con la palma de mi mano?...voy a percutir el cuerpo de mi guitarra...esta cuerda con este dedo... Explora, descubre y, sobre todo, ¡diviértete!.
A partir de ahí, necesitarás tiempo y práctica para irle sacando una mayor y mejor sonoridad a tu guitarra, con una afinación previa y con la ayuda de algún tutorial o persona que te pueda orientar en tus primeros pasos. Con la práctica, tus manos se irán acomodando a tu instrumento. Irás adquiriendo un mayor tono muscular y una mayor precisión y soltura en la articulación de las notas. Podrá parecer que es complicado, pero no desistas, y sigue, a pesar de la molestia que puedas sentir en la yema de tus dedos, o del sonido muteado o sucio que produces por no estar haciendo la suficiente presión en el diapasón, o por tener tus dedos alejados de los trastes. Descansa lo que necesites, pero sigue practicando, si no en ese momento, más adelante. Es una carrera de obstáculos y no de velocidad. Un poco con mucha frecuencia, es más que mucho de vez en cuando. Evita las tensiones innecesarias, y procura tener tus dedos, lo más cerca posible de las cuerdas al tocar.
Puedes seguir aprendiendo, de diferentes maneras, de la mano de alguna persona amiga, algún familiar, internet, de cualquier otra fuente de información, o de un profesor o profesora experimentada. De cualquier forma, si tienes las suficientes ganas, tiempo para practicar, y paciencia, lograrás ampliar tus conocimientos y tus posibilidades expresivas.
Sea cual sea tu camino, mi recomendación es que recibas clases, al menos, en tus inicios, para empezar con una base teórica y práctica sólida, y cuando sientas que no avanzas, o necesites ampliar tus conocimientos de una manera clara, concreta, y adaptada a tu proceso de aprendizaje y necesidades.
Y no te olvides de escuchar mucha música, y motívate viendo y escuchando a grandes guitarristas.
Sea cual sea tu camino, mi recomendación es que recibas clases, al menos, en tus inicios, para empezar con una base teórica y práctica sólida, y cuando sientas que no avanzas, o necesites ampliar tus conocimientos de una manera clara, concreta, y adaptada a tu proceso de aprendizaje y necesidades.
Y no te olvides de escuchar mucha música, y motívate viendo y escuchando a grandes guitarristas.
